Elaborados con diferentes especias, son muy variados, no existe una receta única para elaborarlo, por lo que manda el gusto del comensal.
por Leo Jaciuk
l.jaciuk@nh-hotels.com
Marzo es época de conservas. Se trata del momento de fin de temporada de verano, cuando gran cantidad de vegetales se encuentran en su punto de mayor madurez y momento ideal para realizar preparaciones que nos permitan conservarlas para el invierno.
El chutney es una de ellas. Es una especie de confitura que se elabora con frutas o verduras cocidas en vinagre, con especias muy aromáticas y azúcar.
El término chutney viene dado por los británicos, por quienes es muy apreciado para acompañar unas tostadas, queso o carne fría entre otras cosas. De hecho, parece que hay dudas sobre si esta especialidad es británica o india, de todas formas, la elaboración hindú es más aromática.
Los chutneys son muy variados, no existe una receta única para elaborarlo, por lo que manda el gusto del comensal. Pueden tener una textura fina y homogénea o con tropezones, pueden ser suaves o muy picantes y hay chutneys que se pueden elaborar casi sin cocción y otros que necesitarán hasta dos horas de reducción en el fuego.
Las especias que normalmente se emplean en cualquier chutney y que le proporcionan ese sabor fuerte y picante, son la mostaza, el clavo, la canela, el jengibre, el curry y el chile o las guindillas y su lado más dulce se lo proporciona el azúcar morena.
Se pueden hacer chutneys de uno o varios vegetales mezclados. Quizá los más habituales son los chutneys de mango o de calabacín o zuchini, de tomate, de berenjena, de ciruela, de manzana.
Chutney de durazno
Ingredientes
1.5 kilo de duraznos
1 kilo de manzana verdes
1 cebolla
50 gramos de azúcar
50 gramos de pasas de uva
2 cucharadas de sal
1 cucharada de jengibre fresco, rallado
4 unidades de chiles (o 4 cucharadas de ají molido)
6 unidades de clavos de olor
6 pocillos de vinagre de manzana
Preparación
Pelar los duraznos y las manzanas y cortarlos en cubos. Picar la cebolla. Mezclar todos estos ingredientes junto con el azúcar, las pasas de uva, la sal, el jengibre rallado, los chiles (o ají molido), los clavos de olor y el vinagre en una cacerola de fondo grueso (como las pesadas de acero).
Dejar hervir de 2 a 3 horas (a fuego suave), revolviendo cada tanto hasta que quede una preparación espesa y dorada.
Envasar en caliente en frascos chicos (puede usar los de mermelada o los que vienen con cierre hermético), limpios y enjuagados con alcohol fino. Se conserva hasta 3 meses en la heladera.
Servir el chutney acompañando aves o carne de cerdo asadas y/o grilladas.